Investigadores del grupo de Síndromes Mielodisplásicos (SMD) del Instituto de Investigación contra la Leucemia Josep Carreras han probado con éxito un nuevo método para determinar variantes genéticas relacionadas con el cáncer hematológico en muestras agrupadas de pacientes. El nuevo método representa una mejora respecto al actual, basado en la tecnología de secuenciación de nueva generación, ya que ofrece una solución rentable para el diagnóstico de los pacientes con SMD.
Más del 90% de los pacientes diagnosticados de SMD son portadores de variantes genéticas en su ADN que hacen que sean especialmente susceptibles al cáncer o que directamente lo promueven. Por ello, en las últimas décadas, la comunidad internacional de investigadores ha intentado descifrar las variantes genéticas más relevantes para cada tipo de cáncer y cómo se puede utilizar este conocimiento para tratar a los pacientes de forma más eficaz.
En este sentido, los conocimientos moleculares se utilizan en la práctica clínica no solo en el diagnóstico del cáncer, sino también en las pautas de tratamiento. En los SMD, la metodología que se utiliza preferentemente para descifrar las alteraciones genéticas es la secuenciación de nueva generación multiplexada (tNGS en sus siglas en inglés). Sin embargo, la tNGS es cara y técnicamente compleja y, por lo tanto, de momento no puede considerarse un estándar internacional cuando hay que analizar grandes cantidades de muestras.
Para abordar este problema, un equipo de investigadores del Instituto de Investigación contra la Leucemia Josep Carreras ha estado probando en pacientes con SMD una metodología alternativa que combina la secuenciación de nueva generación y la secuenciación clásica de ADN de Sanger, una tecnología mucho más económica. El equipo, liderado por el Dr. Oriol Calvete y supervisado por el Dr. Francesc Solé, planteó la hipótesis de que la agrupación de muestras de diferentes pacientes con SMD permitiría detectar con precisión las mutaciones características mediante tNGS, a pesar del efecto de dilución.
En una publicación reciente en la revista científica Biomedicines, el equipo demostró que la agrupación de muestras de pacientes con SMD tenía poco impacto en la sensibilidad de la tNGS y que se podían procesar con éxito hasta 4 muestras en un solo experimento, sin perder calidad en los resultados. Tras la identificación de cualquier variante genética preocupante en el pool, la evaluación precisa del paciente portador de la variante puede resolverse fácilmente mediante secuenciación directa por el método Sanger, una tecnología fiable y asentada desde hace tiempo que es más de veinte veces más económica que la tNGS.
Esta experiencia piloto en pacientes con SMD demuestra que el cribado asequible de variantes genéticas relacionadas con el cáncer es posible en un gran número de muestras, manteniendo la precisión de la secuenciación de nueva generación. De este modo, se abre la puerta a la adopción generalizada del cribado genético preciso y fiable de pacientes, a nivel internacional, permitiendo una mejor estratificación de los pacientes y ayudando a los clínicos a elegir la mejor opción de tratamiento.